Los conductores enfrentan un nuevo golpe en sus bolsillos con el reciente anuncio de un incremento en el precio de la gasolina. Según informes, los precios subirán otros $600 pesos, marcando un aumento constante en los costos del combustible que ha estado ocurriendo en los últimos meses. Este aumento, aunque modesto en número, tiene un impacto significativo en el gasto diario de los conductores, especialmente para aquellos cuyos medios de vida dependen en gran medida del transporte. 

Lo que resulta aún más preocupante es que esta subida se suma a una serie de aumentos continuos en los precios del combustible, lo que ha llevado a que muchos se pregunten cuándo cesará esta tendencia al alza. Además, el precio del ACPM, el tipo de combustible utilizado en vehículos diésel, se mantiene sin cambios, lo que agrega una capa adicional de incertidumbre para los conductores que dependen de este tipo de combustible. 

Cabe recordar que el déficit del l Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles -FEPC- en 2022 correspondió a $36,7 billones de pesos y se estima que en 2023 sea de $17,8 billones, del cual 77% correspondería a ACPM. 

El precio promedio de venta al público del ACPM a nivel nacional se mantiene sin ajustes, en $9.065 pesos por galón. 

Para los consumidores, este escenario plantea desafíos financieros adicionales, especialmente en un momento en que muchas personas ya están sintiendo el impacto económico de la pandemia y otros desafíos financieros.