Un bebé de tan solo un año resultó quemado con pólvora en el municipio de Apartadó, Urabá de Antioquia. Este trágico episodio se suma a la lista de incidentes relacionados con la pólvora que, desafortunadamente, han aumentado en la región durante la temporada navideña. 

Hasta la fecha, Antioquia ya registra un preocupante total de 33 personas quemadas con pólvora, y de este número, 15 son menores de edad. La capital, Medellín, también ha experimentado un aumento en los casos, con 13 personas lesionadas debido al uso irresponsable de artículos pirotécnicos. 

Rita Almanza, epidemióloga de la Secretaría de Salud de Medellín, hizo un llamado a la ciudadanía. “La gente subestima la pólvora de luces porque piensan que las chispitas y los volcanes no son nocivos, pero justamente esas esquirlas son las que más generan lesiones en los ojos”. 

Además, Alejandro Marín, líder de urgencias del Hospital San Vicente Fundación, explicó qué se debe hacer en estos casos. “Lo mejor es aplicarse agua tibia, no helada, y consultar a los servicios de urgencias, sobre todo cuando ven que la quemadura evoluciona hacia una ampolla o tiene una gran profundidad, también cuando son lesiones en cara o quemaduras muy extensas”. 

Las autoridades y organizaciones locales están intensificando sus esfuerzos para prevenir más incidentes, recordando a la comunidad la importancia de celebrar de manera segura y responsable.