El ministro de Justicia de Colombia, Néstor Osuna, ha expresado su preocupación por la posibilidad de que Ecuador decida expulsar masivamente a 1.500 presos colombianos que se encuentran en sus cárceles. Según el ministro, esta acción podría generar un desafío legal importante, ya que la entrada de estos reclusos al territorio colombiano podría resultar en su liberación. 

El presidente de ese país, Daniel Noboa, dejó clara su intención de entregar a Colombia 1.500 privados de la libertad connacionales que tienen en sus cárceles; sin embargo, desde el Ministerio de Justicia y de Relaciones Exteriores señalan que si esto ocurre sería una decisión unilateral que rompería el tratado internacional vigente. 

¿Podría el Gobierno colombiano no recibir a estas personas?

Todo colombiano tiene derecho a entrar al país. Si seguimos el procedimiento de repatriación no va a haber problema porque van a pasar de una cárcel en ecuador a una en Colombia, y hemos expuesto nuestra voluntad, si es necesario, de aligerar los trámites. Pero una expulsión masiva no nos permitiría eso, estaríamos ante unos colombianos que el Estado liberó, se aplica la ley colombiana en la frontera, pero si no tienen deudas con la justicia en el país, no sabemos cuál era su situación. 

La preocupación expresada por el ministro de Justicia también pone de relieve los desafíos más amplios que enfrentan los sistemas penitenciarios en la región. La sobrepoblación carcelaria, la violencia dentro de las prisiones y la gestión de reclusos extranjeros son temas que requieren atención y soluciones coordinadas entre los países.