En una acción sin precedentes, el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) llevó a cabo un megaoperativo simultáneo en 124 cárceles de Colombia, con el objetivo de combatir delitos como la corrupción y la extorsión, además de fortalecer la seguridad en los centros penitenciarios. La intervención, que inició a las 5:00 a.m., contó con la participación de más de 3.600 guardias del Inpec, apoyados por efectivos de la Policía Nacional.

El director del Inpec, coronel Daniel Gutiérrez, informó que durante las requisas se decomisaron 796 celulares, 2.712 accesorios para estos dispositivos, 485 tarjetas SIM, 813 armas blancas de fabricación artesanal y cerca de 13 kilogramos de estupefacientes. Además, se encontraron 1.250 litros de licor y elementos de brujería en algunas celdas, utilizados presuntamente para intimidar o manipular a otros internos.

En la cárcel La Modelo de Bogotá, los funcionarios descubrieron caletas ocultas en paredes, pisos y techos, donde los reclusos escondían los elementos prohibidos. El coronel Gutiérrez destacó que estos operativos buscan "incautar y decomisar todos los elementos prohibidos como celulares y armas", con el fin de reducir las actividades delictivas que se gestan desde el interior de los penales.

Un hallazgo particular se registró en la cárcel de mujeres El Buen Pastor en Bogotá, donde se encontraron espacios dedicados a la santería, con imágenes y sustancias putrefactas, utilizados por algunas internas para intentar evitar los operativos del Inpec y ejercer control sobre otras reclusas.

Estos operativos se enmarcan en el plan "Dominó", implementado por el Inpec para frenar la extorsión y otras actividades ilícitas organizadas desde las cárceles. El programa incluye la reubicación periódica de presos considerados altamente peligrosos entre las prisiones de máxima seguridad del país, dificultando así sus operaciones delictivas.

La intervención masiva también permitió identificar casos de corrupción que involucran a funcionarios penitenciarios. En diciembre de 2024, un operativo similar resultó en la captura de seis guardias del Inpec implicados en redes de extorsión que operaban desde las cárceles. Las autoridades continúan investigando para desarticular estas estructuras y garantizar la seguridad dentro y fuera de los centros de reclusión.