El aumento de la violencia en Tibú , con cuatro homicidios registrados el pasado domingo, ha llevado a las autoridades a decretar un toque de queda vigente hasta el 2 de febrero. La restricción, que c omenzó el 27 de enero, prohíbe la circulación de personas y vehículos entre las 8:00 p.m. y las 6:00 a.m. Además, contempla la prohibición de bebidas alcohólicas, porte de armas y el tránsito de motocicletas con parrillero.

La decisión se tomó tras una sesión extraordinaria del Consejo de Seguridad Municipal, con la participación de la Policía, el Ejército y organismos de derechos humanos.

"Estamos enfrentando una situación crítica en materia de orden público. Esta medida es necesaria para proteger a nuestra comunidad. Los grupos armados siguen sembrando el terror en nuestro territorio", declaró el alcalde Richard Claro.

Violencia desbordada en la región

Los enfrentamientos entre grupos armados ilegales han convertido a la zona en un escenario de disputas por el control del narcotráfico y las rutas clandestinas hacia Venezuela. A la fecha, se registran ocho víctimas mortales, más de 13.000 desplazados y alrededor de 17.000 personas confinadas en veredas.

Mientras algunos habitantes respaldan el toque de queda, otros temen sus consecuencias económicas. "Entendemos que la seguridad es prioritaria, pero también necesitamos que el gobierno nos apoye porque estos cierres nos perjudican en las ventas", expresó María Fernanda Avendaño, comerciante local.

Un llamado a la unidad

En medio de la crisis, el alcalde instó a la población a mantenerse firme: "No podemos permitir que el miedo nos divida. Es momento de trabajar juntos para construir un futuro en paz para Tibú y todo el Catatumbo". Hasta el momento, se han entregado 104 toneladas de ayuda humanitaria en la zona, aliviando parcialmente las necesidades de la comunidad.

Los habitantes esperan que estas medidas sean el punto de partida para una acción más contundente por parte del Estado, que permita recuperar la tranquilidad en una de las regiones más golpeadas por el conflicto armado en Colombia.