En un movimiento inusual pero encantador, una empresa ha decidido incorporar a un nuevo miembro a su plantilla laboral junta de distrito de Baguim do Monte, en el municipio de Gondomar (norte de Portugal), pero este nuevo empleado es un poco diferente a lo que podríamos esperar. Se trata de un perro, cuyo nombre es Boris Baguim, que ha sido contratado oficialmente para brindar "amor y cariño" a los trabajadores de la empresa. 

La noticia de este contrato canino se ha convertido en un tema de conversación entre los empleados y ha generado una oleada de comentarios positivos. La empresa ha compartido la historia que los motivó a tomar esta decisión poco convencional. 

Todo comenzó cuando su dueña pidió ayuda a la junta hace unas semanas para dar a Boris en adopción, ya que el propietario de la vivienda en la que iba a vivir no permitía mascotas. El proceso de contratación del nuevo "empleado" fue igualmente inusual. El perro, descrito como amigable y cariñoso, firmó su contrato de una manera única: estampando su huella de pata en el documento oficial de contratación. Si bien este gesto puede parecer más simbólico que legal, refleja la actitud amigable y lúdica de la empresa hacia esta nueva iniciativa. 

El perro pasará sus días en la oficina, brindando compañía y momentos de relajación a los empleados. Los trabajadores pueden interactuar con él durante los descansos y cuando necesiten un respiro de sus responsabilidades laborales. La idea detrás de esta decisión es crear un entorno de trabajo más relajado y feliz. 

“Que todas las organizaciones públicas y privadas que tengan un espacio con posibilidad de adoptar a un animal, sea un perro o un gato, lo hagan”, afirmaron todos los empleados.

“Apelo a que adopten”, además insistieron como mensaje final.