La desesperanza se ha apoderado de una comunidad en el estado de Zacatecas, México, después de que se encontraran los cuerpos de seis jóvenes que habían sido secuestrados el pasado 24 de septiembre. Los adolescentes fueron raptados por un grupo armado, sumiendo a sus familias y a toda la comunidad en un estado de angustia y miedo. 

"La fiscalía acudió al lugar y realizó los peritajes, trabajos forenses, y el día de ayer por la noche los familiares ya pudieron identificar a los jóvenes", dijo el funcionario a la cadena Milenio. Un joven más del grupo de siete fue encontrado el miércoles con vida pero herido. 

Las víctimas, de entre 14 y 18 años, habían sido secuestradas en la madrugada del pasado 24 de septiembre por un grupo armado en una hacienda de la localidad de Villanueva, donde habían asistido a una fiesta. Eran amigos entre sí. 

El descubrimiento de los cuerpos ha generado indignación y tristeza en todo el país, subrayando la persistente amenaza que el crimen organizado representa para las comunidades locales. El presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó el hecho y dijo que el joven herido, identificado como Sergio Yobani Acevedo, "está declarando para conocer el porqué de estos crímenes". 

Las autoridades están trabajando incansablemente para identificar a los perpetradores y llevarlos ante la justicia, pero este trágico evento ha vuelto a poner de manifiesto la urgencia de abordar la violencia y la inseguridad que afectan a muchas regiones de México. 

La muerte de los seis jóvenes se produjo un mes y medio después del secuestro y posible asesinato de otros cinco muchachos, amigos de la infancia, en Lagos de Moreno (estado de Jalisco, oeste), un caso que causó conmoción.